jueves, 19 de noviembre de 2015

ECOTETERA

 lugar: "Ecotetera Coffee and Tea" 
ubicación: Plaza Suiza (2 Norte - 8 Oriente). Talca
especialidad: Café, té, repostería.
daños per cápita: 5.500 aprox 


"Un gallego camina por el Sahara en traje de baño. Un beduino lo mira asombrado y el gallego le dice: Voy a ir a nadar. El beduino contesta: ¡Pero si el océano está a mil trescientos kilómetros de aquí!
El gallego lo mira asombrado y le dice: ¡Coño, pero que playa tan grande!" 

Se que en alguna de estas entradas les he contado sobre mis incursiones deportivas del último tiempo. Todo iba bien me duele hasta pensar, entre el intento que hago por seguir a mi profesora de Yoga, quien supongo que en vez de huesos tiene plasticina...y la hora que tengo que pasar con la sultana en brazos, en cuclillas, en una piscina porque el traje de baño rojo no me queda como a Pamela así que prefiero que aprenda a nadar antes de picarla de baywatch... 
El asunto es que antes de las clases de la jefa, yo pensaba que sabía nadar. Nadar y andar en bicicleta no se olvida, todo el mundo lo dice. Pero hoy, en un acto testimonial, queridos hermanos, vengo a dar fe de que ese mito es más falso que paco rubio porque si, a mis veintiseis  dulce años -el blog es mio- y en orden a demostrarle a la sultana como se hacía, decidí dármelas de Kristel Köbrich y tirarme un largo en la piscina. Dicha aventura terminó conmigo con tres litros de agua en mis pulmones, dos de los cuales cayeron impropiamente desde mi nariz y una tos que traté de disimular con un "chucha, me resfrié"...pero que no era más que ahogo porque SE ME HABÍA OLVIDADO NADAR. Obvio, pasé super piola, porque más encima me compré por internet el traje de baño de LA MUJER MARAVILLA y al pararme el agua me llegaba al ombligo, brillaban las estrellas y los bordes dorados y los novecientos weones secos que nadan ahí cacharon al instante que me había entrado agua al avión invisible y me había mandado el mejor Mago Oli de mi vida.
Entonces, como soy profesional de la autoexposición al ridículo, me decidí a tomar el curso de adultos, porque no puede ser posible que sea la única persona en el mundo que sabe nadar imaginariamente...dolida aún porque hasta ese viernes, yo creía que si me tiraban al agua iba a bucear como una sirena, saldría del agua con el pelo perfecto y sin mocos colgando y más encima con la polera mojada lista pa un calendario Pirelli y la verdad era otra... hubiera salido en una de esas bolsas plásticas de terno, con el cierre hasta arriba y siempre que hubiera tomado la precaución de meterme un puñado de doko en un bolsillo del traje baño pa que me encontrara algún cachupín acuático wena onda en el fondo del mar. 

En una piscina de un club deportivo, que está lleno de weones que nadan perfecto, de viejas que recorren veinteseis veces un carril de 200 metros, de lado a lado, llegan a puerto y siguen conversando, me tocó hacer mi "prueba diagnóstico". Con la raja que tengo, más encima estaba de visita el profesor que me enseñó a nadar, en el paleolítico y que insistía en que "el sabía que yo sabía" y "que como chucha se me iba a olvidar"...porque los profesores de educación física son sádicos encubiertos cuya segunda patria es ESPARTA...y no tuvo en cuenta que mi cerebro privilegiado solo retiene información importante como la dirección de los bares, las botillerias o las zapaterías con descuento y no weás innecesarias como RESPIRAR BAJO EL AGUA o de cual lado sacai el brazo y respirar y botar aire y cantar la mayonesa en un segundo que tenís la cabeza sobre el agua...púdranse. No puedo hacer más de una cosa al mismo tiempo, o floto o respiro o pataleo o saco un brazo, pero jugar al equeco marino, imposible. 
Fin de la prueba diagnóstico, lo hice tan espléndido que terminé en el mismo grupo de un señor que se hunde en la tina y de otro que lo juro que no es webeo, tiene parálisis de la mitad del cuerpo y porfa lo hace mejor que yo. Resultado, FUstración diría la capitán planeta, (que tiene un problema que es serio la dura es pa mearse de la risa no puede decir fru.)
Como estaba deprimida, y la solución OCDE es comprar para pasar las penas, andando por el barrio del retail me bajó el hambre, caché que era miércoles y que ni me había acordado del blog, así que arrastré rauda y velozmente a la Capitán a la Ecotetera.

La Ecotetera es una cafetería, que digamos las cosas por su nombre, siempre me pareció con una leve más que la chucha inspiración en mi placer culpable más snob de todos que es el Starbucks. (Si en este momento está pensando: esta weona no cacha na' y el que la lleva es juan valdez, por favor piense en su familia, porque me dan ganas de asesinarlo porque me importa un pico la calidad de café y lo que me gustan son los pasteles y los de starbucks son irrefutablemente los mejores muffin de arándanos del mundo y más encima tienen menú secreto y así con mi Michael Jacskon me paseo a juan valdez, gracias)

La cosa es que en la Ecotetera, aparte de los café que tienen, que son los mejores que he probado en Talca, había comida. No colación, pero si comida para pasar hasta la once. 
Para almorzar, pedimos waffles con rúcula, aceitunas, queso crema y tomates y una tetera de té navideño. 
Nada de eso puede ser malo; estaban hechos con cariño, con harto de todo y en general encuentro que estaba perfecto pa cuando no andas con mucho tiempo para los tres platos y postre. El acceso a la mezcla de queso caliente (cualquier tipo) y tomate frío debiera estar garantido en la constitución.
El té navideño, de otro planeta. Te negro, pedacitos de almendra, manzana, canela y vainilla... me inspiró con tal magnitud que compré una bolsa pa traerme a la oficina, llegué a armar el árbol a la casa y figuro pensando en la lista de regalos que Capitán Planeta tendrá que cumplir pa renovarle contrato. Aparte de toda la variedad de blends de café, leche o chocolate que tienen, hay variedades de té para salir a probar uno distinto cada vez..
En síntesis, para almorzar todos los días, nones...porque uno necesita de la porotada bailable para ser saludable. Pero para salir a pololear o pasar a su alguito después de la pega, absolutamente recomendado.

Lo más novedoso del almuerzo es que pagué yo... digamos que pensar en la navidad me pone de buen genio.
Le daremos 3 jumbitos a la eco!

Besos y hasta el próximo jueves, aunque capaz que sea antes, porque me voy pa la capital y ahí si que hay harto pa comer...

Toneladas de ñam y de amors!


 P.s. A alguien se le ocurre por qué se llama Ecotetera????        p.s. 2 ... evidentemente, y fuera de joda, mi apellido es Gallego :D!
Mago Oli, antes de las clases en la UCM





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